No, hoy no hay tanta nieve, pero ha nevado, un poco, la sierra está blanca, el castillo también y en el pueblo hemos cambiado la nieve matutina por llovizna, a ¿qué viene esto? pues a nada el otro día en el grupo Loarre del Facebook vi unas fotos muy chulas que habían subido los del grupo y pensé que tenía que subir alguna aqui para que las veais, a ver si tengo un rato y subo alguna de las mías, aunque primero habré de buscarlas, soy tan desordenada que andan dispersas por memorias varias.

Reconozco que el paisaje nevado es muy bonito, pero estaréis conmigo en que es muy incómodo, sin ir más lejos yo soy incapaz de conducir con nieve, me niego en redondo, si me levanto y veo nieve en la calle me doy media vuelta y me vuelvo a la cama aunque esté duchada, pintada y lista para salir a trabajar, algunos pensaréis que soy exagerada, pues no, soy una inutil conduciendo con nieve y así pues prefiero no ser un peligro público en la carretera ni para mí ni para nadie.

Pero reconozco que es bonito estar sentada mirar por la ventana y ver esas plumas blancas que descienden lentamente por el aire y se posan en los tejados del vecino, es muy romántico, las nevadas son románticas o al menos a mí me lo parecen, y es que el romanticismo está denigrado, lo que es un error, porque es bonito el amor, y es bonito soñar con un futuro mejor y que todo sea de color de rosa, igual si todos hiciéramos un esfuerzo en soñar un mundo de color de rosa se volvería rosa, ¿quuién sabe? lo feo es la realidad de la vida, coger el periódico o ver el telediario, eso sí es horroroso. Mi marido aún alucina conmigo, mi hija directamente se ríe de mí, porque no puedo evitarlo y a veces las lágrimas se me escapan, mi madre me mira y suelta un "qué floja te empañó tu tía", jajaja, puede que sea verdad, puede que no me apretase mucho los pañales cuando nací y ella me vistió por primera vez, ¿será por eso que la he querido siempre tanto aún sin ser de mi sangre? Y es que es verdad soy sentimental y lloro con todo, con las noticias si son alegres por alegres si son tristes por tristes, así soy yo, mira que intento evitarlo pero me parece que esta batalla la tengo perdida, aunque no es que me preocupe mucho la verdad, quienes me quieren ya saben que soy así, y el resto del mundo pues allá ellos...

Olvidaba decir que yo nací en casa por un mero accidente climatológico, nevaba y cuando la ambulancia llegó a la plaza yo ya estaba acurrucada en los brazos de mis padres, mi vida está ligada a la nieve.