En esta casa nuestra viene demostrándose todos los años que las vacaciones si no emigramos aunque sea a tres km no son vacaciones. Esta casa es un sinvivir, llaman a todas horas, da igual que tengamos la sana costumbre de dormir la siesta, da igual que me apetezca levantarme a las doce, es imposible, así que he tomado una determinación, es el último año que paso las vacaciones en mi pueblo.

Llevo 15 días de vacaciones y ni me he enterado, si normalmente me levanto a las seis, ahora lo hago a las siete. Todo el día corriendo, esto no es ni medio normal, así que he tomado la determinación de que es el último año que me quedo en casa. ¡Con las ganas que tenía de no viajar, de quedarme aquí tranquila, pasear, charlar, pasar las noches de cháchara en casa Pola,! pues nada imposible, en fin paciencia, no queda otra.

Buenos días chicas.